El término “bebé arcoíris” ha ido cobrando mucha popularidad, ¿de qué se trata?… A continuación aclararemos este interesante tema.
La maternidad es una experiencia llena de muchas ilusiones y satisfacciones, pero a veces también puede representar una gran tristeza al sufrir una pérdida (aborto espontáneo). Los bebés que no logran nacer son llamados bebés estrella, esto significa que nunca dejarán de brillar en el corazón de los padres. Como contraparte, el bebé que llega sano al mundo luego de la pérdida es llamado arcoíris.
El bebé arcoíris trae esperanza, el cese de la tormenta que los padres albergaron en su corazón durante los nueve meses de gestación, cumpliendo finalmente el sueño de poder cargar en sus brazos al esperado bebé.
El propósito de este bebé es equilibrar nuestra vida, llenar la oscuridad con luz y color, convirtiéndose en un motivo para aprender y reconciliarnos con nosotros mismos. Todo hijo debe ser preciado, pero este en particular, es un ser lleno de ilusión.
Todo esto suena a una historia muy romántica, sin embargo, estos casos son más comunes de lo que pensamos. Es muy difícil tener una cifra clara, pero según investigaciones clínicas, el 20% de embarazos terminan en un aborto espontáneo, de los cuales entre 12 y 15% se producen durante las doce semanas iniciales de gestación.
Cuando una mamá o pareja sufre la pérdida de su bebé hay mucha tristeza, culpa y la mayoría de las veces sobrellevar estos sentimientos requiere mucho tiempo para poder ser sanados. Las parejas que logran superar esta etapa deben saber que la guía de un médico es vital para poder avanzar en cada etapa de la gestación. Los chequeos y la correcta alimentación aumentarán las probabilidades de tener un embarazo exitoso.
Si conoces a alguien que esté en espera de un bebé arcoíris sé respetuoso con las decisiones e intimidad de la pareja. No hagas preguntas incómodas, dale todo tu apoyo a la pareja, es muy importante contar con amigos y familia que les demuestren cariño.
Si tu eres madre o padre de un bebé arcoíris, disfrútalo al máximo. Haz logrado atravesar un proceso que conlleva dolor, pero también haz conocido el rostro de la esperanza. Ahora también eres capaz de ayudar y comprender el dolor de parejas que están atravesando la misma situación.
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